SEVILLA (2022.05.18) CEU Andalucía cuenta con diferentes áreas y servicios que forman parte de un engranaje para que todo marche bien. El personal no docente lleva a cabo cada día sus funciones para que todo discurra con absoluta normalidad, realizando una labor fundamental para hacer posible este proyecto educativo que recientemente ha cumplido 25 años de historia.

Desde Gerencia se trabaja para que la institución cuente con el soporte necesario -en cuanto a infraestructuras, instalaciones, cuestiones económicas…- para que pueda desarrollar su labor cada día, ofreciendo al alumno un servicio basado en la excelencia.

Mario Alba forma parte de este equipo de la Gerencia -dirigido por Antonio Jiménez-, asumiendo la responsabilidad del Servicio de Contrataciones y Compras de la Fundación, desde donde señala que la coordinación con todos los centros y el resto de áreas y servicios es fundamental para poder hacer bien su trabajo. “Asumimos principalmente las tareas de gestionar todas las compras, tanto de material fungible como las inversiones en equipamiento e instalaciones. También nos encargamos de la licitación, negociación y seguimiento de todas aquellas contrataciones de los diferentes servicios que requiere la Fundación y que son prestados por empresas externas, como por ejemplo el servicio de catering, transportes, servicio de seguridad, seguros…”, apunta.

Asimismo, realizan un seguimiento y control de todo el inmovilizado -mobiliario, instalaciones y terrenos, maquinaria, construcciones, gastos amortizables…-desde que se adquiere hasta que se da de baja por su sustitución o desuso, controlando la ubicación y estado del mismo. Actualmente, también gestiona el Servicio de Conserjería de los diferentes centros académicos.

Sus comienzos en CEU Andalucía se remontan al año 2006, “cuando la Fundación solo contaba con la Escuela de Magisterio Cardenal Spínola y dos cursos de Formación Profesional y el volumen de trabajo era mucho menor. Entonces me encargaba de la Administración, de Servicios Generales y de Personal”, recuerda.

Volviendo al presente, señala que “después de estos últimos años, donde gran parte del trabajo se ha tenido que realizar remotamente y mediante videoconferencias, retomar la presencialidad, el contacto con los compañeros y poder tratar personalmente con los proveedores es una gran ventaja, pero también hemos aprendido que se puede alternar el trabajo presencial con el teletrabajo y que en muchas ocasiones realizar una videoconferencia permite ganar tiempo y evitar el desplazamiento de algunos participantes si se encuentran a distancia”, puntualiza Mario Alba.

De cara al final de curso que afrontan en estas semanas, explica que “nuestro trabajo ahora se centra en controlar que las partidas que se aprobaron no se desvíen y así poder cumplir con la previsión de cierre. También estamos inmersos en la preparación de los presupuestos para el curso que viene, solicitando ofertas a diferentes proveedores de diferentes partidas. Para ello, tenemos que coordinarnos con el resto de áreas y centros para que nos faciliten sus necesidades y poder tenerlas en cuenta a la hora de valorar y presupuestar las mismas”.