Señor, tú nos identificas a cada uno de nosotros. Nos quieres con un trato personal y cercano. Te das, en Jesús, para el bien de todos. Ayúdanos para que seamos como él: hermanos, humildes, sencillos, abiertos, conscientes, acogedores, solidarios, alegres. Haz que nuestra identidad de cristianos brille en el año que comenzamos. (Reflexión: Equipo Bíblico Verbo. La Buena Noticia 2024 www.ceuediciones.es).
Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 2, 16-21.
En aquel tiempo, los pastores fueron a toda prisa hacia Belén y encontraron a María, a José y al niño, recostado en el pesebre. Después de verlo, contaron lo que se les había dicho de aquel niño, y cuantos los oían quedaban maravillados. María, por su parte, guardaba todas estas cosas y las meditaba en su corazón.
Los pastores se volvieron a sus campos, alabando y glorificando a Dios por todo cuanto habían visto y oído, según lo que se les había anunciado.
Cumplidos los ocho días, circuncidaron al niño y le pusieron el nombre de Jesús, aquel mismo que había dicho el ángel, antes de que el niño fuera concebido.
Palabra del Señor