Juan Luis Proenza, profesor del Centro de Estudios Profesionales CEU: “La formación y capacitación en el campo de la tecnología representa uno de los pilares más fuertes en el CEP, con un enfoque eminentemente práctico”

SEVILLA (2021.08.03) El Centro de Estudios Profesionales CEU renueva cada año su oferta académica con el objetivo de dar respuesta a las necesidades del mercado laboral, procurando a sus alumnos una formación basada en la excelencia. Se trata no solo de transmitirles conocimientos académicos, sino también una serie de valores que les serán muy útiles a la hora de incorporarse al mundo laboral e integrarse en una organización.

Así lo explica Juan Luis Proenza, docente del CEP CEU en el ámbito Tech, “estos valores se transmiten desde el primer momento, llevando a cabo actividades en equipo, de dinámicas de grupo, dejando que cada uno aporte sus ideas, facilitando tiempo para la investigación y búsqueda. Mi referente en educación ha sido José Luis Vicente Córdoba -catedrático de Matemáticas-, quien siempre me inculcó que para enseñar hay que saber crear expectativas y ganas de investigar el tema a tratar, de manera que el alumno sienta la necesidad de aprender y enriquecer sus ideas sobre dicha cuestión”.

Respecto a su experiencia como profesor de formación personal, recalca que “es una satisfacción personal poder trasmitir y enseñar los valores, conocimientos y experiencias aprendidos durante todos estos años en Ayesa -donde trabajo-. Además de tener un compromiso claro con la excelencia académica, la formación en valores, innovación y el continuo desarrollo tecnológico”. Sobre el perfil de los alumnos, comenta que “aunque proceden de diferentes caminos, se nota que tienen muy clara la vocación en el mundo TIC y presentan una gran motivación cuando ven a los profesores trabajando en este sector y en grandes empresas”.

Reconoce que “la formación y capacitación en el campo de la tecnología representa uno de los pilares más fuertes en el Centro de Estudios Profesionales CEU, con un enfoque eminentemente práctico y profesional. Esto hace que los programas formativos sean los adecuados para que el alumno adquiera los conocimientos y las competencias demandadas por las empresas, contribuyendo así a su óptimo desarrollo en el ámbito laboral”.

Uno de los puntos más destacados de la formación profesional es el hecho de que para completar su preparación, los alumnos deben realizar unas prácticas en un centro de trabajo que les permiten aplicar los conocimientos adquiridos en situaciones reales. En este sentido, Juan Luis Proenza subraya que “como, además, el profesorado cuenta con la experiencia como profesionales, también los dotamos de recursos para que sepan tener respuestas ante las diferentes situaciones que se le puedan plantear. Asimismo, los tutores llevan un seguimiento personalizado de cada alumno para poder conocer en todo momento sus avances y dificultades y poderlos guiar mejor durante esta etapa”.