SEVILLA (2020.03.27). Durante este tiempo de cuarentena, el estrés, los cambios de horarios y la responsabilidad de tener que cuidar a niños y mayores hace que algunos conciban la alimentación como una vía de escape, pudiendo cometer errores que perjudiquen nuestra salud. 

Desde el área de Nutrición y Bromatología/Gabinete de Nutrición y Dietética (Policlínica Universitaria) de la Universidad CEU San Pablo se ofrecen una serie de consejos que nos ayudarán a elegir bien en estos días, “atendiendo al hambre real y no al hambre emocional”. 

Recomiendan, en primer lugar, llevar a cabo una planificación, haciendo un menú semanal que nos impida caer en la improvisación. Mantener un horario y evitar entrar en la cocina a deshora son otras de las pautas a seguir, así como destinar espacios físicos concretos para comer, reduciendo así la ingesta de alimentos en el resto de habitaciones de la casa. 

Respecto a lo que hay que comer, poco varían los consejos respecto al resto del año: verduras, frutas, lácteos o huevos y evitar los ultraprocesados, ya que –además– en estos momentos, pueden generar una mayor adicción de la que provocan en otras circunstancias. Y se hace hincapié en la necesidad de mantenerse hidratado, “aunque el desgaste físico sea menor, no se debe esperar a tener sed para ingerir líquidos”. 

Es buena ocasión para fomentar técnicas culinarias saludables y disfrutar de la comida, ahora que –aparentemente- disponemos de más tiempo para compartir alrededor de una mesa con la familia. 

Centrándose en las consecuencias que el COVID-19 ha tenido en el día a día de los ciudadanos, hacen un llamamiento a la tranquilidad a la hora de ir a comprar, “evitando acaparar, debemos ser solidarios y comprar solo lo que necesitamos. Es mejor pagar con tarjeta que con dinero para no fomentar el contagio, así como guardar la distancia de seguridad con el resto y utilizar los guantes para coger frutas o verduras”.   

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