La motivación, como objeto de estudio

Enmarcada en los Miércoles Culturales, esta conferencia -impartida por Eduardo J. Fernández Ozcorta- destacó la importancia una buena estimulación del individuo para la consecución de objetivos

SEVILLA (2019.11.26). El salón de actos de la Fundación San Pablo Andalucía CEU ha acogido una conferencia titulada “Nuevas fronteras de la investigación de la motivación intrínseca. De la teoría a la práctica”, impartida por Eduardo J. Fernández Ozcorta, profesor del Centro de Estudios Universitarios Cardenal Spínola CEU y docente del Máster en Optimización del Entrenamiento y Readaptación Físico-Deportiva (CEU&ESYDE).

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En esta charla, dirigida a los alumnos del Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de CEU Cardenal Spínola, Fernández Ozcorta ha profundizado en la importancia de la motivación intrínseca, “entendida como la tendencia natural de las personas a ser curiosas, buscar desafíos y ejercer y desarrollar sus habilidades y conocimientos”.

Según ha explicado, “durante las últimas cuatro décadas, la investigación experimental y de campo ha sido guiada por la Teoría de la Autodeterminación (SDT -siglas en inglés-), surgida tras el trabajo realizado por Edward L. Deci y Richard M. Ryan. Según estos expertos, la motivación intrínseca puede predecir un mejor aprendizaje, rendimiento, creatividad, desarrollo óptimo y bienestar psicológico”.

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Tal y como expuso el profesor Fernández, “es una macro teoría de la motivación humana y la personalidad, que trata de las preocupaciones inherentes al crecimiento y las tendencias innatas y necesidades psicológicas de las personas. Se refiere a la motivación que hay detrás de las decisiones, sin influencia externa e interferencia. Esta creencia se centra en el grado en que el comportamiento del individuo es automotivado y autodeterminado”.

Una de las principales teorías que componen la de la autodeterminación es la que alude a las Necesidades Psicológicas Básicas, que se refieren a tres ámbitos: la competencia, busca controlar el resultado y el dominio de la experiencia; la autonomía, el deseo de ser agentes causales de la propia vida y actuar en armonía con el yo integrado de uno; y la filiación, la tendencia a interactuar, estar conectado y experimentar el cuidado de los demás. Se consideran necesidades universales innatas, no aprendidas (instintivas) y apreciadas en la humanidad a través del tiempo, el género y la cultura, constituyendo la base de la automotivación y la integración de la personalidad.

La SDT defiende que hay que dar un enfoque diferente a la motivación, “teniendo en cuenta lo que estimula a una persona en un momento dado, en lugar de verla como un concepto unitario”, subrayó el docente.

“Además -concluyó su exposición- la SDT distingue entre diferentes tipos de motivación. La motivación intrínseca es el impulso natural e inherente para buscar los desafíos y las nuevas posibilidades, se asocia con el desarrollo cognitivo y social. Por otro lado, la motivación extrínseca proviene de fuentes externas y podemos diferenciar tres variantes: comportamiento regulado externamente, que se realiza por demanda externa o posible recompensa; regulación de conducta introyectada, conlleva asumir regulaciones a la conducta, pero no aceptarlas como propias; regulación integrada, se asimila por completo, se incluyen en las autoevaluaciones y creencias de una persona sobre sus necesidades personales”.

Con los Miércoles Culturales, el Centro de Estudios Cardenal Spínola CEU tiene como objetivo ofrecer a sus estudiantes formación complementaria a la que reciben en clase, profundizando en cuestiones que les serán de gran utilidad para el desempeño futuro de su profesión.